jueves, 9 de enero de 2014

Y

Luego de muchos litros de mate tal vez consiga ser también yo como un niño. Tomar tu mano y sonreir del gusto que me causa. Lenguas de miel por los dedos, o algo por el estilo decía Cortazar.

domingo, 16 de diciembre de 2012

Las leyes de la frontera- Javier Cercas



















Sinopsis

En el verano de 1978, cuando España no ha salido aún del franquismo y no termina de entrar en la democracia y las fronteras sociales y morales parecen más porosas que nunca, un adolescente llamado Ignacio Cañas conoce por casualidad al Zarco y a Tere, dos delincuentes de su edad, y ese encuentro cambiará para siempre su vida. Treinta años más tarde, un escritor recibe el encargo de escribir un libro sobre el Zarco, convertido para entonces en un mito de la delincuencia juvenil de la Transición, pero lo que el escritor acaba encontrando no es la verdad concreta del Zarco, sino una verdad imprevista y universal, que nos atañe a todos. Así, a través de un relato que no concede un instante de tregua, escondiendo su extraordinaria complejidad bajo una superficie transparente, la novela se convierte en una apasionada pesquisa sobre los límites de nuestra libertad, sobre las motivaciones inescrutables de nuestros actos y sobre la naturaleza inasible de la verdad. También confirma a Javier Cercas como una de las figuras indispensables de la narrativa europea contemporánea.

El tema no es original puesto que sobre él se ha escrito mucho,  incluso rodado películas, pero es que  está muy bien narrado y desde las primeras páginas de la novela  me he encotrado compartiendo, participando con los personajes.

Hay personas que nacen marcados por el destino, familias pobres y desetructuradas sin posibilidad de mejorar,  y si cometen un error no les está permitido rectificar, en cambio otras tienen en sus manos el poder decidir qué hacer con su vida.

El Zarco le dice al Gafitas que abandone, que regrese a los estudios y a su familia, pues nunca será como ellos, a lo que éste responde:
 ¿porqué no soy como vosotros?
En las úlimas páginas del libro,Gafitas,han pasado treinta años y ahora le llaman por su nombre, dice:
¿por qué ellos y yo no?
Es sobrecogedor.
Los que tenemos una edad  hemos visto o vivido situaciones similares.Algún  amigo o conocido murió a causa de la droga. Mientras leía pensaba en  El Vaquilla, y el director que lo encumbró a la fama, y me pregunto para qué le sirvió esa fama ¿acaso pensó de verdad que con hacerle protagonista de una película le ayudaría a salir a flote de la mala vida? Pienso que `por el contrario, quizá esa fama  le hundió más y más hasta el terrible fin.
Una novela que da qué pensar, conversaciones directas y claras, lugares y entornos que conozco muy bien. Me ha encantado y recomiendo su lectura.

Como siempre, dejo algunos párrafos:
-No lo sé; puede ser. Ahora detesto a los que lo han hecho-en realidad, esa es una de las razones por las que acepté hablar con usted: para que termine con las patrañas y diga la verdad sobre él-, pero quizá el primero en idealizarlo fuera yo. Puede ser. En cierto modo sería lógico. Mire, aquel principio de verano yo solo era un chaval imberbe y asustado que casi de un día para otro había visto que sus mejores amigos se convertían en sus peores enemigos y que su familia ya no era capaz de defenderle y que todas las cosas que había aprendido hasta entonces no le servían para nada o estaban equivocadas, así que ¿cómo quiere que, pasada la inquietud o el miedo de los primeros días, no prefiriera quedarme con el Zarco y su basca?....

Esa era la historia que se repetía sin demasiadas variaciones en cada capítulo
-Y usted de algún modo empezó a identificarse con ella.
-Quite el de algún modo: ¿para qué sirven las historias si no es para identificarse con ellas? y sobre todo:¿para qué le sirven a un adolescente?...

Lloré mucho rato allí, en silencio, sentado casi a oscuras junto a mi padre en aquel comedor semi vacío de una casa de perdida en un pueblo perdido, con un desconsuelo que no conocía o no recordaba, con la sensación de haber de haber desentrañado de golpe el significado completo de la palabra fracaso y de haber descubierto un sabor desconocido, que era el sabor de la vida adulta

Soy de los que piensan que la ficción siempre supera a la realidad pero la realidad siempre es más rica que la ficción.


sábado, 3 de noviembre de 2012

Flores en las grietas.-Richard Ford


















Contraportada

Este libro reúne por primera vez los textos memorialísticos y ensayísticos de Richard Ford, en los que reflexiona sobre la literatura y la vida, sobre la vida como germen de la literatura y sobre la literatura como indagación en los misterios de la vida. Hay textos íntimos como el recuerdo de un instante de felicidad con su padre o de la etapa adolescente que pasó en el hotel regentado por su abuelo tras la muerte de su progenitor. Y textos sobre literatura: el sentido de la escritura; el proceso creativo; del placer de la lectura; el cuento entendido como género de la audacia y la concentración narrativa; Chéjov como fuente de la que brota toda la cuentística contemporánea; Carver como ser humano, más allá del genio literario y del mito; la poderosa verdad narrativa de escritores como Richard Yates o James Salter... Un libro imprescindible para completar el canon fordiano, para descubrir sus fuentes de inspiración, las claves íntimas de su universo literario y su pasión de lector.













Que Richard Ford es un autor de culto nadie lo duda, he disfrutado con cada uno de sus libros que he tenido la suerte de leer, pero este último no me ha convencido. No se a ciencia cierta si el fallo ( a mi modo de ver, claro) está en que falta algo o por el contrario le sobra. Me ha resultado interesante lo que cuenta en él, pero una vez finalizado y a medida que  pasan los días mas convencida estoy de  no es lo que yo esperaba, quizá por el título creí que sería más biográfico que otra cosa, tengo la sensación que es un libro impuesto, forzado, sugerido, apresurado o como sea, pero que no está escrito de la manera que suele hacerlo, cuando le apetece  y le sale del alma; aún así  los textos  son maravillosos

Reflexiones sobre  literatura y vida como esta me ha gustado:
...no deseo que las reacciones de mis libros me afecten de tal manera que me vea obligado a tomar otra decisión acerca de qué escribir y qué no. Si sigo adelante, quiero sentirme libre para escribir lo que crea que puedo escribir bien, sea lo que fuere. Quiero que mis historias, si es posible, afecten a los lectores como la gran literatura me ha afectado a mi....
 Aunque también me ha encantado cuando relata la relación que mantuvo con su abuelo y vivía con él en el  hotel que regentaba.
Resalto especialmente los capítulos dedicados a Raymond Carver, resaltando su lado mas humano y  el gran escritor que era, que es...desconocía que hubiesen mantenido una estrecha amistad,  y de Chéjov,  centrándose sobre todo en La dama del perrito, ambos me han parecido magníficos.
También el análisis profundo que realiza de  la novela de  Richard Yates,  Revolutionary road , libro que por cierto no he leído, ni pensaba leerlo, pero que ahora he cambiado de opinión
También quiero resaltar las palabras que dedica a James Salter, escritor al que admiro mucho y he leído algunos de sus libros
En definitiva, y siempre según mi criterio, un libro correcto, porque está muy bien escrito, aunque su  lectura no creo en absoluto que sea imprescindible como afirma la contraportada .







viernes, 2 de noviembre de 2012

El viaje de Kokoshkin.- Hans Joachim Schädlich












Magnífica crónica narrada en primera persona y que transcurre entre varios tiempos . El presente con ambiente distendido y amable, incluso irónico con la gente que comparte viaje en  el barco que le lleva de vuelta a América, y el  pasado, cruel y doloroso a causa de las aberraciones políticas que le tocó vivir
Kokoshkin es mayor, tiene noventa y cinco años, pero siente el deseo de volver una vez mas, quizá sea la última  a los lugares que han formado parte de su vida, para ello envía un  mail a un amigo que conoció en una librería de viejo en Praga en el 1968

Jakub Hlavàcek, que así se llama su amigo  acepta  acompañarle y empiezan el trayecto  por San Petesburgo que es donde nacio y vivió Kokoshkin hasta la edad de cinco años, cuando asesinaron a su padre que en aquellos momentos era ministro del Gobierno Provisional. Tras el asesinato su madre y él se trasladan a Odesa junto al poeta Bunin y su esposa Vera, aunque al cabo de poco tienen que huir de nuevo y se deciden por Berlin, allí se convierten en cuidadanos apátridas igual que todos los emigrantes rusos de aquella época. Explica que asesinaron al padre de Nabokov al querer este  ayudar a su amigo Miliukov.
También habla sobre Gorki y su doble juego "Por un lado aceptaba dinero de Lenin y por otro criticaba el terror de lenin contra artistas e intelectuales rusos"
En Berlin estudia, pero la inminente llegada de los nazis hace que huya de nuevo, esta vez  viaja  solo y se dirige hacia Praga, allí conoce a Aline, su primer amor, también a los que escriben en el periódico Prager  Tagblatt, Max Brod, Johanes Urzidil, Alfred Polgard y Roda Roda, Friedrich Torberg y Egon Erwin Kisch.
Todo parece ir bien, pero la sombra de los nazis  está cada vez mas cerca, así que decide embarcarse hacia América.

Al principo del libro una pasajera le pregunta el porqué de su viaje, si es causa de la nostalgia, y  él responde:
 No. Sencillamente tenía que ver una vez más algunos lugares de mi pasado. San Petesburgo, Berlin, Praga, adonde me fui en el año mil novecientos treinta y tres y volví en el sesenta y ocho durante la llamada Primavera de Praga 

Me gusta, porque no mira el pasado con rencor, las cosas son como son y así deben aceptarse, y si a uno le toca dar tumbos por el mundo hasta encontrar su lugar  pues se da tumbos.
Tras el viajes, cuando baja del barco y pide un taxi, el taxista le pregunta a dónde le lleva, él responde :
A Boston
A casa.
Porque es así, uno es de donde hace su vida y forma sus raíces.
Una vez más leo un libro que me demuestra que para decir todo no hace falta llenar mil páginas, en este caso ciento setenta y seis sirven para dejarme maravillada.
 







 



Hans Joachim Schädlich
 

jueves, 1 de noviembre de 2012

Nada se opone a la noche.-Delphine de Vigan













Después de encontrar a Lucile, su madre, muerta en misteriosas circunstancias, Delphine de Vigan se convierte en una sagaz detective dispuesta a reconstruir la vida de la desaparecida. Los cientos de fotografías tomadas durante años, la crónica de George, abuelo de Delphine, registrada en cintas de casette, las vacaciones de la familia filmadas en Super 8, o las conversaciones mantenidas por la escritora con sus hermanos, son los materiales de los que se nutre la memoria de los Poirier. Nos hallamos ante una espléndida, sobrecogedora crónica familiar en el París de los años cincuenta, sesenta y setenta, pero también ante una reflexión en el tiempo presente sobre la «verdad» de la escritura. Y muy pronto descubrimos, detectives-lectores también nosotros, que son muchas las versiones de una misma historia, y que narrar implica elegir una de esas versiones y una manera de contarla, y que esta elección a veces es dolorosa. En el transcurso del viaje de la cronista al pasado de su familia y a su propia infancia irán aflorando los secretos más oscuros. «Escribo sobre Lucile con mis ojos de niña que creció demasiado deprisa, escribo ese misterio que siempre fue ella para mí, a la vez tan presente y tan lejana; ella, que desde que cumplí diez años, nunca más me cogió entre sus brazos.» Para Delphine de Vigan, escribir sobre su madre es cerrar heridas abiertas muchos años atrás, y recuperar la novela familiar es emprender un camino de catarsis y de superación del duelo, a la manera del que nos descubre Roland Barthes en sus escritos póstumos. Pero es también un ejercicio de alto riesgo, puesto que en el curso de esta investigación expone ante los miembros de su familia, como si ellos no fueran más que lectores anónimos en la multitud, su propio secreto más terrible.
Otro de esos libros que su lectura no deja indiferente. Me pregunto que lleva a un autor, o autora a investigar y posteriormente airear los secretos de su familia. Qué tiene las madres que tanto atrae a escribir sobre ellas? Es algo que me intriga y a la vez me fascina leer este tipo de libros, en cierto modo me ayuda a conocer un poco mas a su autor.
La primera parte se describe a una familia normal, unos padres jóvenes y encantadores a los que les encanta los niños y por lo tanto tienen familia numerosa. Ella ama de casa y él publicista que poco a poco consigue montar su propia empresa y que consigue una posición acomodada. Cada verano se van de vacaciones  todos juntos a la playa,hasta ahí todo normal, pero después empiezan a aflorar los verdaderos secretos. Nada es tan idílico como parece, y el sufrimiento en la vida de Lucile se acentúa a medida que pasan los años.
Hay actos que no deberían silenciarse jamás, cosas que una vez sabidas no deberían quedar impunes.
 
"...¿basta el miedo para callar?..."
No conocía a esta autora, por lo tanto es el primer libro que leo de ella, pero me ha resultado una lectura adictiva, por una parte no veía el momento de dejar el libro y por otra deseaba que no terminara.
Han habido párrafos con los que me he emocionado y otros que he sentido repulsión, también pena y horror
"...Por la noche no duermo, me siento acosada. Forrest duerme arriba. Voy a mear, mi padre me acechaba, me da un somnífero y me mete en su cama.
Me violó mientras dormía, yo tenía dieciseis años, lo he dicho.. "
"..Vi lo que estábamos viviendo y que la muerte es irremediable.."

lunes, 24 de septiembre de 2012

El vaso de plata.-Antoni Marí













La nostalgia de las excursiones dominicales, la desolación por la muerte de un amigo, el trastorno de los sentidos al viajar por primera vez lejos de casa, el vértigo que provoca el riesgo de una travesura, la ebriedad de los primeros días de vacaciones...
Las emocionantes estampas que componen El vaso de plata rescatan de la memoria distintos momentos de la adolescencia de su protagonista, relatos conmovedores sobre la formación moral, sobre aquel «viaje a la singularidad que constituye toda adolescencia», por decirlo en palabras de Martínez de Pisón. La quietud y permanencia que destilan sus páginas, la sensación de que nos cuentan cosas «que han pasado y que están destinadas a seguir pasando» son uno de los mayores logros de un libro que ha retratado la adolescencia como pocos en nuestra reciente literatura.
Este libro, el primero de narrativa que publicó su autor y por el que obtuvo el premio Ciudad de Barcelona y el Crítica Serra d’Or de 1992, está destinado a acompañar nuestro propio aprendizaje del dolor y del amor y a perdurar en la memoria lectora. Un libro que nos enseña, como diría su autor, que «la vida es un pasar de una adolescencia a otra».

El libro está compuesto de catorce capítulos, cada uno de ellos lleva por título el nombre de una misericordia, y lo narrado en dicho capítulo tiene relación con el título 
1.-Dar de beber al sediento
Narra las excursiones  que realizaba con su padre a la montaña cada domingo por la mañana
2.-Dar de comer al hambriento
Los miercoles su padre se reunía con…la anécdota del capón
3.-Vestir al desnudo
Su primer viaje lejos de casa, marcha a Frankfurt por una temporada ya que gana una beca para investigación. Se siente solo y triste lejos de los suyos y por momentos piensa en abandonar
 4.-Dar posada al peregrino
Cada verano pasan las vacaciones lejos de la ciudad, en una casa que el abuelo posee en el campo. En este capítulo explica los preparativos y el viaje
5.-Redimir a los cautivos
La vivienda y la anécdota del gato
6.-Visitar a los enfermos
Pablo es su amigo, ambos están muy compenetrados, pero Pablo contrae una enfermedad rara y grave que le lleva a la muerte
7.-Enterrad a los muertos
 Aquí nos explica la muerte y entierro de su abuela, lo que siente cuando abren el nicho donde reposan los restos de su abuelo para enterrarlos juntos.
8.-Enseñar al que no sabe
La portada del libro narra sin palabras este capítulo, qué divertido es
9.-Dar buen consejo a quien lo ha de menester
Como descubre la magia de la música clásica
10.-Corregir al que yerra

Una excursión en coche que termina mal, una anécdota divertidísima, este capítulo me ha hecho soltar mas de una carcajada
11.-Consolar al triste
Tras portarse mal, corresponde imponer castigo. Este era ir al cuarto de las ratas
12.-Perdonar injurias
A veces te pasas media vida sin saber de alguien que por cosas de la vida se aleja nuestro entorno, pero un día sin venir a cuento hay reencuentro en el sitio mas insospechado, como por ejemplo, haciendo cola para pagar unos impuestos
13.-Sufrir con paciencia las flaquezas y molestas del prójimo
El abuelo es un gran lector, tiene su sillón y sitio propio, donde  a diario disfruta de diversas lecturas, entre ellas las de Somerset Maugham, después queda dormido por un rato. Miguel que anda cerca se da cuenta, ve el frasco que contiene pintura de uñas que momentos antes su madre a utilizado y no se le ocurre otra cosa que pintar las del abuelo mientras este duerme…o no, quizá solo esté disimulando
14.-Rogar a Dios por los vivos y por los muertos
Octavio es amigo de Miguel, su madre se encuentra hospitalizada y le pide a su hijo  que cuando pueda salir del hospital la lleve al cementerio porque desea visitar la tumba de su esposo fallecido hace tiempo. Octavio pide  a Miguel que les acompañe y este accede. Entran al cementerio y están un rato dentro, pero claro se olvidan de que el cementerio cierra sus puertas y ellos quedan encerrados, hasta que encuentran una escalera metálica , suben y a ella cuando están arriba saltan a la calle. Otro capitulo que me ha hecho reír una barbaridad imaginando a la pobre 
 Después de leer últimamente algunos libros bastante duros, me ha gustado mucho volver  leer esta novela. Está escrita con un fino sentido del humor,  es divertida a la vez que tierna. La forma en que trata el día a día de unos adolescentes que en breve pasarán a formar parte de la vida adulta.



La portada, como he dicho mas arriba habla por si sola y el prólogo también es magnífico.
Un libro muy recomendable


domingo, 12 de agosto de 2012

Un hombre que duerme, de Georges Perec












Novela cumbre de la «Literatura Bartleby», auténtico símbolo generacional, Un hombre que duerme narra la peripecia de un estudiante que decide no levantarse de la cama el día de sus exámenes de Sociología, abandonar sus estudios, romper toda relación con amigos y parientes, y recluirse en sí mismo y en su chambre de bonne, donde todo es gris. Más tarde se dedicará a deambular incansable por París, a ir al cine, a leer los titulares de los periódicos, pero como lo haría un sonámbulo. Para el estudiante todo forma parte de una vaga estrategia encaminada a alejarse de los deseos materiales, de la ambición y de su dependencia de los objetos, los ambientes, los sonidos y aromas de París, la ciudad que lo ha acogido y que lo acabará fagocitando.

Terminé de leerlo el otro día, hacía mucho que lo tenía  en casa esperando su turno, aunque a decir verdad no llevo un orden riguroso a la hora de elegir lecturas, más bien escogo según el estado de ánimo en que me encuentre en esos momentos, el caso es que con pocos días de diferencia he leído este y El pozo, de Onetti, del que un día de estos  también pondré lo que me ha parecido su lectura.

Bien, ahora sigamos con el de hoy, con este hombre que duerme y que está el pobre un poco descolocado y sintiéndose fuera del mundo.

Me ha sorprendido mucho porque lo he leído sin saber de qué iba, no había leído previamente ningún tipo de reseña ni comentario, pero Perec, al que descubrí como a tantos otros autores gracias a Vila Matas, es un autor que siempre me ha interesado muchísimo.

La primera sorpresa  me la he llevado porque imaginaba que se trataba de una novela y no es así, mas bien es un relato escrito en segunda persona. Poco importa, puesto que la historia no deja indiferente, se trata de un chico de veinticinco años al que un buen día le da por…dormir, metafóricamente hablando, opta por dejarse llevar, no hablar ni tratarse con la gente, solo escucha los ruidos que produce su vecino el cual vive en la habitación contigua, aunque jamás le ha visto la cara, ni tienen la más remota idea de cómo es físicamente, aunque claro está imagina mil formas y maneras. Tiempo tiene para eso.

Pasa los días en el interior se buhardilla, durmiendo, observando y pensando, también jugando en solitario a los naipes. Por la noche sale a la calle, pasea y visita cafés, lee Le Monde y relee libros. Alguna vez también va al cine.

Por unos días realiza un viaje a  visitar a sus padres que viven en un pequeño pueblo de montaña, también allí vive recluido en su habitación releyendo libros de aventuras, aquellos aquellos libros que ya leyó durante su niñez.

Ahora que han transcurrido unos días y la lectura ha reposado en mi cabeza, puedo decir que me ha gustado aunque no sé si he comprendido la intención de Perec. Por momentos me he agobiado con la pasividad del protagonista, con ese empeño en “reconocerse", pero...

"Has dejado de hablar y sólo el silenciote ha respondido. Pero estas palabras, estos miles, millones de palabras que se han detenido en tu garganta, las palabras sin continuación, los gritos de alegría, las palabras de amor, las risotadas tontas, ¿cuándo las recuperarás?
Ahora vives en el terror del silencio, pero ¿no eres tú el más silencioso de todos?"

 Una labor de introspección un tanto engorrosa, porque a fin de cuentas creo que no lo consigue y ese dejarse llevar no tiene sentido


Porque dice esto..." has aprendido nada, salvo que la soledad no enseña nada, que la indiferencia no enseña nada: era un engaño, una ilusión fascinante y con trampa. Estabas ahí solo y ahí estaba todo y quería protegerte; que entre el mundo y tú los puentes se suprimieran para siempre. Pero eres tan poca cosa y el mundo es una palabra tan grande…"

Y la alusión  sobre el Bartleby de Melville lo culmina en las últimas páginas cuando habla de…" Hace un tiempo en Nueva York, a algunos centenares de metros de los malecones donde baten las últimas olas del Atlántico, un hombre se dejó morir. Trabajaba como escribiente para un jurista. Escondido tras un biombo, permanecía sentado en su escritorio y nunca se movía…."

El Bartleby de Melville recuerdo que me inspiró mucha ternura y tristeza con su "preferiría no hacerlo", pero el protagonista del libro me ha parecido un tipo insoportable.

Conclusión, es un placer leer a Perec aunque al principio cueste, o mejor dicho, me ha costado involucrarme en la historia, pero una vez  conseguido ha sido una experiencia muy gratificante.

Literatura de un gran nivel